Hola!
Que capitulo! Un sin fin de eventos pasados y presentes llegan a mi mente que pudieran ser utilizados para hacer algo diferente o para finalmente encontrar una hipótesis de porque no funcionaron las cosas… pero hoy me voy a enfocar en nuestra comunidad de aprendizaje, compartiendo mis pensamientos como posturas internas, eligiendo otras y haciendo las conexiones para crear algo diferente.
Nuestra comunidad la veo, o mejor dicho la conecto con un proceso de consultoría de una organización, donde tenemos la empresa (nuestro grupo), los colaboradores (cada uno de nosotros) y un producto intelectual que si bien es la suma de los conocimientos individuales adquiridos durante el proceso de leer el libro y compartirlo, tenemos una brecha para potencializarlo al enriquecerlo con la profundidad de nuestro compartir. Entonces tenemos al consultor (George) donde acordamos como empresa el hacer un pago por los servicios consultados (nuestra colegiatura) usando una estrategia de involucramiento.
Nuestro consultor ha marcado la pauta para las conexiones, ha proveído los mecanismos para que dichas conexiones se gesten, pero algo falta para que suceda.
Esta historia la he vivido varias veces con empresas y culturas diversas y hasta hoy he obtenido uno de los siguientes resultados:
1.- De una estrategia de involucramiento se pasa a una estrategia de instrumentación (definiciones en el libro pagina 51) y se alcanza total o parcialmente el resultado.
2.- Continúa con el proyecto con resultados parciales.
3.- Se asume como que este no es el momento propicio para que suceda y se cancela el proyecto
4.- Se deja que se muera el proyecto por inanición.
En algunos casos, se crean conexiones (con un valor intangible) que se capitalizan en proyectos subsecuentes.
En algunos casos se crean barreras (también con un costo intangible) que cobran la factura en proyectos subsecuentes.
En este caso George tiene dos cachuchas: la de consultor y la de CEO, ya que como CEO puede cambiar la estrategia y hacer funcionar (¿?) la comunidad de aprendizaje con nuevas políticas (por ejemplo, usar un sistema de puntos por comentario de blog para aprobar la materia).
Al mismo tiempo que escribo encuentro la respuesta al recapitular a Block “Puede cualquier trabajo que valga la pena ser hecho si la libertad y el significado no son considerados o son vistos como irrelevantes?” Es decir, crear involucramiento a nivel de la calle: visto desde primera persona.
Y entonces, quien necesito ser hoy para no repetir los resultados del pasado?
Que necesito cambiar en mi manera de hablar y expresarme al mundo para cambiar mi forma de pensar y lo que hago en relación al involucramiento?
De qué manera puedo crear una postura que considere la vida como una oportunidad de crear valor?
De qué manera evocar libremente en el otro el identificar la gran oportunidad que hay de crear valor al darle profundidad a nuestras conexiones?
Será que necesitamos llegar al fondo de la desconexión y la presión de no obtener nuestra aprobación de la materia para poder crear una conversación de involucramiento significativa? (página 62)
Creo que la mayoría de las preguntas comparten algo en común en la respuesta…
Me gustaría hacer una dinámica muy sencilla, sentarnos en círculo, presentarnos y responder a la pregunta:
Que no me gustaría que supieran de mi en relación a la materia que estamos tomando?
… y crear intimidad al compartir lo incompartible.
Federico, me parecen sumamente interesantes los cuestionamientos que me planteas, los cuales me han hecho reflexionar y me los quedo de tarea para seguir reflexionando, sobretodo en esta última pregunta que nos realizas, muchas gracias.
ResponderEliminarQue onda fede, pues te cuento que me dejaste pensando tanto con el blog con lo que me dijiste, y me acorde de mis buenos tiempos apoyando en una consultoría. A veces la consultoría es como una avalancha, algo pasa de proporciones enormes que cambia el paisaje, pero antes de desatarse esa avalancha, se va acumulando nieve o material poco a poco, y parece que nada se mueve, y todo lo que necesita es un golpecito que desata una gran reacción en cadena. Veremos que pasa
ResponderEliminarFederico, te fuiste hasta la cocina. Yo también me incluiré en el círculo. Se me ocurre algo, después de que tú nos comentes esta entrada, formaremos el círculo con voluntarios dejando una silla vacía. Los demás se sentarán afuera, alrededor. O sea, dos círculos concéntricos. ¡Y vamos hasta la cocina todos! Las personas en el segundo círculo podrán entrar, compartir y salir ocupando por un momento la silla vacía.
ResponderEliminarEstamos en clase y estamos todavía pensado que decir o bien estoy pensándolo yo, una excelente forma de cambiar la forma de expresar, pensar platicar. a mi me gustaría saber también de donde viene este "Hablar desde adentro"
ResponderEliminary también como poder aplicarlo en una organización en donde las "Personas problema" podrian boicotear esta dinámica.
Julio, la conversación de anoche no es para cualquier grupo, ni sería la misma pregunta. Conversar con autenticidad, decir lo que queremos decir puede nacer de algún miembro o del consultor mismo. Está en nuestras manos. Podemos comentar más adelante las señales que indican que sería apropiado. En mi experiencia ha habido varios momentos en distintos contextos, algunos propiciados por mí, otros que emergieron...en este momento me vienen a la mente tres ocasiones. Seguro hay más.
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