miércoles, 23 de marzo de 2011

The power of conversations at work - Algo falta para que suceda… y sucedió.

Esta propuesta es de alguna manera una respuesta a las múltiples preguntas del blog del 24 de febrero “Algo falta para que suceda…”
Si bien, de acuerdo a Peter Block, no todas las conversaciones son ocasiones para involucrarse significativamente (pag 62),  Que hay de la posibilidad de crear la ocasión?
Una alternativa que funcionó, sin necesidad de mezclar la estrategia de involucramiento con la de instrumentación fue la de crear la posibilidad de un propósito que fuera más allá de la propia existencia.
Al conectarse el grupo con algo más grande que ellos mismos, comenzó la apertura de mente y corazón, se creó el espacio para hacer el llamado de “a bordo!!!”  
Nació en cada uno de ellos el “Quiero pertenecer… la elección propia de su propio destino”
Este es el contexto al que llego basándolo en el contenido que surgió de un taller de “Equipos colaborativos” para un grupo de ingenieros investigadores para la excavación de pozos petroleros.
Como funcionaría esto en clase?
De qué manera voy a contribuir a mí mismo, a mi familia, a mis amigos, a México y a la humanidad tomando esta clase?
Que tendrá que hacer diferente a lo que estoy haciendo hoy para contribuir a la humanidad lo que descubrí en la pregunta anterior?
Tomar el tiempo para contestar estas preguntas, podría darnos la oportunidad de llevarnos a un nivel de conexión más profundo…


2 comentarios:

  1. Bien, ojalá nos puedas compartir tu experiencia en la próxima clase y también relacionar estas preguntas con el modelo de seis lentes de Dee Hock, especialmente la primera.

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  2. Federico, nuevamente me haces reflexionar con las preguntas que planteas y pienso que aquel ejercicio que realizamos, realmente nos hizo crear conexiones como grupo, por lo que espero esta conexión se vaya fortaleciendo cada vez más.

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